- Las obras tienen una inversión de más de 105.000 euros y un plazo estimado de seis semanas.
- Se instalarán luminarias y proyectores desde la Plaza de José de Espronceda hasta la Plaza de la Paz.
La calle José María Pereda, en pleno barrio de El Ensanche, afronta una renovación significativa de su alumbrado público. El objetivo es mejorar la visibilidad en aceras y pasos de peatones en una de las vías más transitadas de la zona, donde la densidad del arbolado había oscurecido parte del recorrido. La actuación, largamente demandada por los vecinos, supone un paso más en la estrategia municipal de reforzar la seguridad en las calles.
Los trabajos, que comenzaron esta semana, contemplan la ampliación de 70 luminarias a lo largo de la vía y la instalación de 14 proyectores destinados específicamente a iluminar los pasos de peatones. La intervención se extiende desde la altura de la Plaza de José de Espronceda hasta la Plaza de la Paz, en el cruce con la Avenida Miguel de Unamuno. Según las previsiones, el plazo de ejecución es de unas seis semanas y la inversión supera los 105.000 euros.
El Ensanche es uno de los barrios con mayor crecimiento poblacional de Alcalá en los últimos años. La calle José María Pereda se ha convertido en un eje fundamental para el tráfico peatonal y rodado, ya que conecta zonas residenciales con áreas comerciales, educativas y de servicios. La falta de luz suficiente, acentuada por la presencia de arbolado, había generado quejas vecinales relacionadas con la seguridad vial y la comodidad en los desplazamientos nocturnos.
La mejora del alumbrado en José María Pereda se suma a otras intervenciones recientes en diferentes puntos de la ciudad. En los últimos meses se han ejecutado trabajos similares en la Avenida del Val, el Parque de Sementales, el aparcamiento disuasorio junto a Roca, la plaza de Reina María Cristina o la zona próxima a la Plaza de la Paloma. Según los datos municipales, la inversión acumulada en este tipo de actuaciones supera los 200.000 euros.
El refuerzo de la iluminación pública responde a un doble propósito: mejorar la visibilidad de conductores y peatones, y reforzar la percepción de seguridad en los entornos urbanos. En calles con alto tránsito, como las de El Ensanche, la calidad del alumbrado es clave para prevenir accidentes y fomentar la movilidad peatonal. Además, contar con pasos de peatones mejor iluminados es una medida cada vez más extendida en las ciudades para reducir riesgos en los cruces.