- El vídeo explica que basta con que no exista consentimiento para considerar una conducta como agresión.
- También advierte que el silencio, el miedo o la confusión son señales claras de ausencia de consentimiento.
La Policía Nacional ha publicado un nuevo vídeo en sus redes sociales para sensibilizar a la ciudadanía sobre qué situaciones constituyen una agresión sexual. El objetivo es ofrecer una explicación directa y comprensible sobre el consentimiento, en un contexto en el que los delitos contra la libertad sexual siguen generando preocupación social y jurídica en España.
El mensaje del vídeo es contundente: “Si no puedes comprender o decidir si te encuentras en una situación vulnerable, no hay consentimiento válido y, por lo tanto, hay agresión”. En el caso de los menores de 16 años, también se aclara que nunca puede hablarse de consentimiento. El vídeo insiste en que “basta con que no exista consentimiento” para que un acto sea considerado agresión.
Además, se recuerda que “el silencio, el miedo o la confusión son señales claras” de que no existe consentimiento. De este modo, no siempre es necesario escuchar un “no” explícito: el respeto debe ser la base de cualquier relación interpersonal. Con este enfoque, la campaña busca llegar especialmente a adolescentes y jóvenes, colectivos más expuestos a situaciones de vulnerabilidad.
El contexto refuerza la necesidad de este tipo de iniciativas. Según los datos del Ministerio del Interior, los delitos contra la libertad sexual aumentaron un 3,8 % en España en el primer trimestre de 2025. En la Comunidad de Madrid, las denuncias crecieron un 8,8 %, aunque en Alcalá de Henares se registró una ligera bajada en las agresiones con penetración respecto al año anterior. Estas cifras muestran que el fenómeno sigue presente y que requiere de medidas continuas de prevención y sensibilización.
La Policía Nacional recuerda que cualquier persona que sea víctima de una agresión sexual puede acudir a la comisaría más cercana, donde agentes especializados ofrecen asesoramiento y ayuda sin juicios y con un trato respetuoso. Con campañas como esta, la institución busca que el concepto de consentimiento sea comprendido de forma clara y universal.
El reto, ahora, es que estos mensajes no se queden en el plano de la concienciación, sino que calen en la sociedad y contribuyan a reducir la incidencia de los delitos sexuales. La clave estará en combinar la información con la educación y el refuerzo de los recursos disponibles para las víctimas.