- Tres personas heridas y varias mascotas rescatadas en un incendio reciente subrayan la importancia de prevenir estos incidentes.
- Consejos clave del cuerpo de bomberos para evitar incendios y riesgos asociados al monóxido de carbono.
El reciente incendio registrado en Alcalá de Henares, que dejó tres personas heridas y obligó al rescate de varias mascotas, ha puesto en primer plano la importancia de estar preparados para prevenir y actuar frente a emergencias de este tipo. La rápida intervención de los servicios de emergencia evitó que el suceso tuviera consecuencias más graves.
El cuerpo de bomberos, a través de la campaña «Calor Seguro» de la Comunidad de Madrid, ha aprovechado la ocasión para recordar a la ciudadanía una serie de medidas esenciales que contribuyen a reducir el riesgo de incendios en el hogar, especialmente en invierno, una época marcada por el uso intensivo de sistemas de calefacción,.
Con la llegada del frío, «aumenta el número de incendios y de intoxicaciones por monóxido de carbono», explican los bomberos en un reciente vídeo informativo. Entre las recomendaciones destacadas, subrayan que «nunca debemos poner ropa seca sobre estufas, calefactores o braseros» y que es fundamental «mantener una distancia de al menos un metro entre estos elementos y cualquier material inflamable».
Además, señalan que los aparatos de combustión, como braseros o estufas que funcionan con leña, carbón o gas, «jamás deben introducirse en los dormitorios mientras dormimos». También advierten sobre el uso de dispositivos diseñados para exteriores, como los camping gas, indicando que «nunca deben utilizarse en espacios cerrados».
La ventilación diaria de las estancias es otra medida clave para prevenir la acumulación de monóxido de carbono, un gas incoloro e inodoro que puede resultar mortal. «Todos los días, durante unos minutos, abriremos bien las ventanas y, cuando estemos utilizando estos aparatos, mantendremos siempre una ventana o una puerta entreabierta», recomiendan.
Si pese a las precauciones se produce un incendio, actuar con rapidez y serenidad puede salvar vidas. Entre las medidas básicas, destacan la evacuación inmediata del lugar, evitando el uso de ascensores, y cerrar las puertas tras de sí para ralentizar la propagación del fuego y el humo. También es esencial alertar a los servicios de emergencia llamando al 112 y proporcionar toda la información posible sobre la situación.
En cuanto a intentar apagar el fuego, solo es recomendable si se trata de un foco pequeño y manejable, y si se dispone de los medios adecuados para hacerlo con seguridad.
El monóxido de carbono es uno de los principales peligros asociados al uso de sistemas de combustión en espacios cerrados. Este gas, indetectable para los sentidos humanos, puede causar mareos, náuseas y confusión, llegando incluso a provocar la pérdida de consciencia. Para evitar intoxicaciones, el cuerpo de bomberos recomienda instalar detectores específicos y realizar revisiones periódicas de calderas y sistemas de calefacción.
La prevención y la preparación son fundamentales para evitar tragedias relacionadas con incendios y otros accidentes domésticos. El cuerpo de bomberos de la Comunidad de Madrid recalca la importancia de seguir estas pautas y de actuar con responsabilidad al utilizar aparatos de calefacción en el hogar. Estas medidas, aunque sencillas, pueden marcar la diferencia en situaciones de emergencia.