- Cientos de personas acompañaron a la Hermandad de Jesús Despojado por las calles del centro histórico.
- El estreno del paso de palio de María Santísima de la Paz fue uno de los momentos más aclamados del recorrido.
En una tarde con previsión de lluvia y cielos amenazantes, centenares de personas se congregaron en las calles del centro de Alcalá de Henares para presenciar la procesión del Domingo de Ramos, protagonizada por la Hermandad de Jesús Despojado de sus Vestiduras, María Santísima de la Paz y Esperanza y San Juan Evangelista.
La estación de penitencia comenzó a primera hora de la tarde y se prolongó durante cerca de siete horas, en una jornada que transcurrió sin incidentes y estuvo marcada por la devoción de los asistentes. Aunque las nubes grises no dieron tregua, la procesión siguió adelante sin alteraciones en su recorrido. «Ni la poquita lluvia que cayó pudo con los pasos», comentaba un vecino al paso de la Hermandad, en referencia a la persistencia de los cofrades y el compromiso de los presentes.
El desfile procesional contó con el acompañamiento musical de dos formaciones: la Agrupación Musical Nuestra Señora del Rosario de Crevillent, que abrió el paso con los sones del Misterio, y la Banda de Música Municipal de Pozoblanco, que acompañó el palio de María Santísima de la Paz, cuya salida por primera vez fue recibida con especial emoción por parte del público.
Durante todo el recorrido, numerosos vecinos y visitantes se sumaron al cortejo, que avanzó al ritmo pausado de los costaleros por calles emblemáticas del casco histórico. El silencio respetuoso solo se rompía por los aplausos puntuales, las marchas procesionales o las oraciones susurradas.
Entre la multitud se encontraban también algunos concejales del equipo de Gobierno local, como Antonio Saldaña, Teófilo Lozano y Antonio Peñalver, que participaron en determinados tramos acompañando a la Hermandad. Su presencia, como es habitual, fue discreta y sin protagonismos.
La del Domingo de Ramos es una de las procesiones más esperadas por la comunidad cofrade complutense. Este año, el nuevo palio se convirtió en uno de los grandes reclamos del día, tanto por su factura como por su simbología.
La jornada concluyó sin incidentes y con un elevado grado de participación ciudadana, en un ambiente solemne que sirvió de prólogo para el resto de las celebraciones de Semana Santa en Alcalá de Henares.
Imágenes de la procesión de Jesús Despojado de Alcalá de Henares










