- El Ayuntamiento aplicará una moratoria para evitar sanciones a quienes estén a la espera de su autorización como residentes.
- La nueva ORA, en vigor desde enero, ha duplicado las plazas reguladas en el centro histórico de la ciudad.
Los vecinos y vecinas que hayan presentado su solicitud para obtener la autorización gratuita de aparcamiento como residentes antes del 11 de abril podrán seguir estacionando en las zonas reguladas sin riesgo de ser sancionados, aunque su solicitud aún no haya sido resuelta. Así lo ha comunicado el Ayuntamiento esta semana, en un intento por aliviar la transición al nuevo sistema de regulación del estacionamiento.
La medida busca ofrecer un margen de adaptación a los residentes, en un momento en que la entrada en vigor de la nueva Ordenanza Reguladora del Aparcamiento (ORA) ha modificado significativamente el mapa del aparcamiento en la ciudad. Desde enero de 2025, la normativa ha duplicado el número de plazas controladas, pasando de poco más de 400 a casi 900, lo que ha generado inquietudes y preguntas entre los vecinos del centro histórico y zonas aledañas.
El Consistorio ha indicado que, mientras se resuelven las solicitudes recibidas antes del 11 de abril, no se aplicarán sanciones a los vehículos de residentes debidamente identificados. Aunque el proceso de solicitud puede hacerse por vía telemática o presencial, muchos ciudadanos han optado por realizarlo a través de medios digitales para evitar esperas, según han reconocido fuentes municipales.
La reestructuración del aparcamiento tiene como objetivo, según el Ayuntamiento, facilitar el estacionamiento próximo a las viviendas, fomentar la rotación de vehículos y mejorar la movilidad en las calles del casco histórico. No obstante, la implantación del nuevo modelo ha venido acompañada de cierto desconcierto vecinal, tanto por la rapidez de su implementación como por la disponibilidad de plazas en las zonas más concurridas.
Por el momento, no se han hecho públicos los datos sobre el volumen de solicitudes registradas ni el tiempo medio que están tardando en resolverse. En este contexto, la decisión de suspender temporalmente las sanciones busca evitar perjuicios a los vecinos mientras se completa la tramitación de sus permisos.
El futuro de la ORA dependerá, en parte, de cómo evolucione esta fase inicial. El seguimiento ciudadano y la respuesta del Ayuntamiento ante las incidencias marcarán el rumbo de una regulación que ya ha empezado a transformar el día a día de muchos alcalaínos.