- Expertos alertan sobre el impacto del negacionismo y la desinformación en la salud pública.
- La investigadora Xisca Sureda advierte que el cambio climático y la globalización aumentan el riesgo de futuras pandemias.
El avance del negacionismo y la desinformación en redes sociales preocupa a la comunidad científica, que advierte de los peligros de cuestionar la evidencia científica en un momento en el que el mundo podría estar al borde de una nueva pandemia. En un nuevo episodio del pódcast De VIVA voz, la investigadora en Salud Pública Xisca Sureda, de la Universidad de Alcalá, analiza las consecuencias de la desconfianza en la ciencia y la importancia de la divulgación rigurosa.
Cinco años después del estallido de la pandemia de COVID-19, la comunidad científica advierte que el mundo no está exento de nuevas crisis sanitarias. «Esa posibilidad es real, lo que no sabemos es cuándo ni cómo», advierte Sureda, quien insiste en la necesidad de prepararse con más investigación y recursos en salud pública. Factores como el cambio climático y la globalización facilitan la aparición y propagación de nuevos virus, lo que hace imprescindible la confianza en la ciencia para detectar y frenar futuras amenazas.
En un mundo hiperconectado, la información falsa se propaga con rapidez, generando desconfianza en la comunidad científica. «Tenemos que seguir divulgando ciencia de calidad, ciencia de excelencia, basada en trabajos con datos originales que tienen una rigurosidad detrás metodológica», recalca Sureda, quien también lanza un aviso a los usuarios de redes sociales: «Quienes usamos las redes debemos ser muy críticos e ir con mucho cuidado a lo que leemos».
El negacionismo y la desinformación no solo desacreditan a los expertos, sino que pueden poner en riesgo la salud de la población. Durante la pandemia de COVID-19, la difusión de bulos y teorías conspirativas dificultó la aplicación de medidas de prevención y redujo la confianza en las vacunas, lo que evidencia el impacto real de este problema.
Más allá de los virus, la sociedad también se enfrenta a otras «epidemias silenciosas» que requieren atención urgente. «La salud mental, las adicciones en adolescentes, la soledad no deseada o la violencia de género son crisis que no siempre se visibilizan lo suficiente», señala Sureda. Estas problemáticas también necesitan un enfoque basado en la evidencia y políticas respaldadas por la investigación científica.
Desde la Universidad de Alcalá, Sureda insiste en la importancia de trasladar el conocimiento académico a la ciudadanía. «Es clave que los resultados de investigación se conviertan en intervenciones y en decisiones políticas respaldadas por la sociedad», afirma.
El episodio completo de De VIVA voz ya está disponible en plataformas como iVoox, Apple Podcast y Spotify, así como en formato videopodcast en el canal de YouTube de la Universidad de Alcalá.